MINDFUL EATING, CONSEJOS PARA COMER MEJOR

¿Qué es Mindful Eating y para qué sirve?

Mindfull Eating o Alimentación Consciente tiene como filosofía «un bocado en cada vez». El objetivo de esta técnica es comer siendo capaces de estar atentos de cada bocado, de las texturas, sabores, olores… de los alimentos que pasan por tu boca. Además, también intenta involucrar en cada individuo la capacidad de percibir las sensaciones físicas asociadas al comer: hambre, saciedad… y todos los sentimientos involucrados.

Consejos para evitar comer demasiado:

1. Relájate y come despacio: permítete comer de todo, pero con presencia y calma. Prueba a dejar los cubiertos en el plato mientras masticas.

2. Examina tu despensa: se consciente mientras realizas tu compra, sólo así llenarás tu casa con las mejores elecciones para ti.

3. Visualiza tus patrones alimentarios: pregúntate diferentes cuestiones cuando sientas la necesidad de comer sin control: ¿qué estoy sintiendo?, ¿qué hora es?, ¿con quién estoy?, ¿dónde estoy?, ¿qué tipo de pensamientos tengo?… El autoconocimiento te ayudará a evitar o adelantarte a futuros atracones.

4. Controla tu masticación: es más fácil ingerir más cuando la masticación es fácil o nula. Comprueba por ti mismo la diferencia que hay de masticar comida de verdad a comida procesada precocinada.

5. Proponte hábitos saludables que vayan acordes a tus metas: céntrate en actividades que te hagan feliz y así te resultará más fácil salir del círculo de atracón-culpa- atracón.

6. Prioriza CALIDAD: siempre insisto en este punto. Todas las últimas publicaciones enfatizan esta premisa: ¡comida de calidad! Las comidas procesadas elaboradas con ingredientes de baja calidad no son nutritivas y no te ayudan a controlar tu ingesta.

La importancia de las texturas de las comidas en el Mindful Eating

Las sensaciones al comer varían enormemente en función a la textura seleccionada 

(provocando diferentes respuestas fisiológicas en nuestro organismo). En la imagen principal muestro una ensalada de garbanzos, aliñada con los mismos ingredientes que llevaría si hiciese un hummus tradicional: zumo de limón, pimentón, sésamo, sal y aceite de oliva.

Cuando elegimos comer el garbanzo entero, nos obligamos a masticar, a ir más despacio, a saborear… Cuando tenemos una crema, por norma general, la tragamos sin apenas dejarla un tiempo en la boca, disminuyendo el tiempo de contacto con las primeras enzimas digestivas y haciendo que la ingesta sea más rápida y menos saciante.

Jugar con esta información nos permite adaptar las comidas en función de las necesidades de cada uno. Es bueno variar de alimentos y texturas, y es muy bueno comer alimentos en su forma más natural posible, ya que nos permite reeducar el paladar y disfrutar más de la comida saludable.

Da igual que hablemos de vegetales o de carne (diferente respuesta ante un filete o carne picada), con el pescado (no es lo mismo comer una rodaja atún natural que atún de lata), con las patatas (no es lo mismo un puré de patata que una patata cocida) ni es lo mismo comer una manzana cruda y una onza de chocolate que una compota con cobertura de chocolate…. Las respuestas hedónicas pueden ser controladas mejor de esta forma y ayudar a personas con impulsos a comer sin control. .

Ama tu comida, tu cuerpo, tu mente y tu vida ¡Que sólo tenemos una oportunidad y merece ser vivida con todo! 

¿Tienes alguna consulta?