¿Quién puede resistirse a algo así? ¿y si además sabes que está hecha de forma natural y con ingredientes de primera calidad?
Las reuniones en casa ya forman parte de nuestra vida cotidiana. Nos encanta estar con nuestros seres queridos por lo que la hostelería se ha readaptado para que podamos llevar sus menús a casa pero también nos hemos dado cuenta de que podemos ser grandes creadores y cocineros.
Los nutricionistas sabemos bien que las elaboraciones muy sabrosas y con varias raciones no son nuestro gran aliado si queremos perder peso o mejorar la composición corporal, por lo que hacer recetas para compartir es una gran idea. Los dulces saludables pueden ser una opción vistosa y nutritiva para invitar a nuestros amigos a desayunar o merendar, pasando un buen rato y desviando toda nuestra atención de la comida.
«El postre es como una canción para sentirse bien. Las mejores te hacen bailar».
Chef Edward Lee
INGREDIENTES:
- Base:
- Copos de maíz.
- Relleno:
- Queso fresco batido 0%
- Leche desnatada o Bebida vegetal al gusto
- Pasta de dátiles (Casera o EOS).
- Gelatina en hojas (6uds)
- Cobertura:
- Crema de cacao y avellanas (yo he usado EOS).
- Agua.
PREPARACIÓN:
Lo primero es limpiar el molde desmontable que vamos a utilizar y engrasarlo para facilitar el desmoldado (yo he usado una brocha con AOVE).
Base:
Mezclar en un bol los copos de maíz (yo he usado sobre 200g) con la crema de cacao y avellanas. Quedará una pasta densa que hay que extender en la base del molde, presionando con una cuchara hasta conseguir una capa del grosor que deseemos.
Relleno:
- Hidratar las hojas de gelatina en agua fría (según indicaciones del fabricante).
- Procesar el queso fresco batido, media taza de leche y 2-3 cucharadas grandes de pasta de dátil (en función al grado de dulzor deseado).
- Calentar media taza de leche y derretir la gelatina en ella. A continuación, integrar bien con el resto de relleno y verter la mezcla en el molde.
- Refrigerar hasta que la tarta quede firme (puedes dejarla toda la noche).
Cobertura:
- Mezclar la crema de cacao y avellanas con un poco de agua y procesar hasta conseguir una crema homogénea.
- Verter sobre la tarta ya desmoldada (lo ideal es despegar con cuidado los bordes, con ayuda de una espátula de silicona antes de abrir el molde, para evitar que se rompa).
- Extender con cuidado y decorar al gusto, por ejemplo con frutos rojos y semillas.
Disfrutar con todos los sentidos.
INFORMACIÓN NUTRICIONAL
Es una tarta hecha con pocos ingredientes y naturales, pero no por ello podemos comer una cantidad infinita (esto sucede con todas las elaboraciones, dulces y saladas, que hacemos en casa).
SANO NO ES INFINITO
Si analizamos su composición tenemos una receta que tiene un 50% de hidratos de carbono, más de un 30% de grasas y casi un 20% de proteína. Puede resultar llamativo el alto porcentaje graso partiendo de la base de que usamos lácteos desnatados y cereales, pero el aporte de los frutos secos y del cacao no es despreciable.
En función al tamaño de la porción, si dividimos la tarta en 6 u 8 porciones, estaremos hablando de raciones de entre 400 y 600 kcal. Así que habrá que saber encajar esta porción de energía en nuestra dieta.
Podríamos incorporarla en el desayuno o como un merecido postentreno dando margen a una porción más grande. Si es por capricho, mejor de forma puntual.
La nutrición va más allá de contar calorías y cuadrar macros, la buena nutrición nos da salud y bienestar, nos libera de pensamientos obsesivos y nos da energía para movernos más y mejor.
Cuando comemos un postre buscamos satisfacer un antojo de dulce y lo ideal es que se adapte a cada persona y necesidad. La receta que comparto es nutritiva porque nos aporta proteínas completas, carbohidratos de absorción lenta, vitaminas, minerales, grasas de buena calidad y fibra soluble e insoluble. La calidad de los ingredientes marca la diferencia a nivel digestivo y metabólico: no solo tendremos un postre sabroso, sino que aportará un buen sustrato para nuestra Microbiota y microelementos para un buen funcionamiento metabólico.
Si nuestro objetivo fuera hacer una tarta con las mínimas calorías posibles podríamos hacer unos simples cambios:
- Base: copos de maíz y plátano maduro.
- Relleno: Edulcorante acalórico en lugar de dátiles.
- Cobertura: frutatriturada o mermelada sin azúcar.